23 de febrero de 2020

Empresa de jetpack cada vez más cerca de convertir a sus pilotos en Iron Man

jetpack

Desde que el hombre adquirió conciencia sobre el cielo, volar se convirtió en una fijación que lo llevaría a intentar por todos los medios desarrollar mecanismos y aparatos que le permitieran obtener la capacidad de elevarse de la tierra para explorar este vasto espacio.

Con el paso del tiempo surgieron tecnologías que le permitieron al hombre dar rienda suelta a su inventiva hasta crear el avión, lo cual, parecía representar el final de un camino recorrido desde épocas ancestrales.

Sin embargo, el avión solo representó el comienzo de todo lo que luego sería creado para permitir al hombre superar los límites que el cielo ofrecía en términos de velocidad y altura, manteniendo un esfuerzo constante en su intención de alcanzar nuevos hitos.

Es así como actualmente el equipo de Jetman Dubai llevó a cabo el desarrollo de un traje provisto de alas con el cual el equipo asegura haber obtenido un éxito rotundo al hacer que un piloto despegara desde el suelo para luego efectuar una sesión de vuelo a gran altura.

Dicho suceso tuvo lugar hace algunos días en la pista de Skydive Dubai ubicada en Emiratos Árabes Unidos donde el piloto de Jetman Vince Reffett efectuó un despegue que luego acompañó de un vuelo a mas de 1800 metros de altura donde llevó a cabo diferentes maniobras que le permitieron volar, detenerse y girar, como si del propio Iron Man se tratara.

Ya en ocasiones anteriores los pilotos de Jetman habían tenido la oportunidad de efectuar lanzamientos desde estructuras ubicadas a gran altura o vehículos como helicópteros, pero nunca desde el suelo.

Durante la sesión de vuelo en la cual Reffett se encontraba viajando a una velocidad de 241 kms/h este piloto solo requirió de 30 segundos para elevarse a una altura de mil metros, manteniéndose en vuelo por un tiempo aproximado de 3 minutos, siendo capaz incluso de efectuar una maniobra de bucle con el traje de alas, al mejor estilo de Iron Man.

Posteriormente, al encontrarse a una altura de 1500 metros Reffett abrió su paracaídas para proceder a aterrizar sano y salvo en el suelo.

Fabricado en fibra de carbono, el traje de alas cuenta con 4 mini-motores a reacción que le otorgan propulsión, acompañado de una boquilla de vectorización de empuje, la cual, es operada manualmente por el piloto para ejercer control sobre el eje de guiñada y poder con ello tener la posibilidad de girar de izquierda a derecha y viceversa mientras se encuentra volando horizontalmente.




☛ El artículo completo original de Alexander Alvarado lo puedes ver aquí.

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