Llegar a la casa y ponerse a jugar en línea, puede tener consecuencias reales ocasionadas por este mundo virtual, sobre todo en la satisfacción marital. Investigadores de Brigham Young University encontraron que más que el tiempo que se pasa frente a la pantalla, la razón principal que ocasiona la insatisfacción es cuando los videojuegos afectan la hora y rutina de sueño del matrimonio, según publicó la revista Time.
Cuando una persona jugaba mucho más que la otra, la satisfacción marital descendía, según encontraron los investigadores. El 75% de las parejas de estos adictos al videojuego se quejaban y le pedían más esfuerzo y compromiso en el matrimonio. En estos casos, donde uno se quedaba jugando y el otro se iba a acostar, la satisfacción marital bajaba y discutían más.
En su mayoría eran los hombres, en un 84%, los únicos en la pareja que jugaban y en un 73% quienes estaban más tiempo frente a la consola cuando ambos jugaban videojuegos.
Sin embargo, cuando los dos tenían interés por esta actividad y pasaban el mismo tiempo jugando, reportaron una buena satisfacción conyugal. Incluso el 76% dijo que le hacía bien jugar para el matrimonio y que al interactuar en línea tenían una buena satisfacción marital. Curiosamente, el bienestar aumentaba cuando jugaban en equipos contrario.
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