¿Se acabará algún día esta locura de los youtubers? La cadena de comida rápida In-N-Out de Estados Unidos está demandando a un youtuber (ugh) que quiso jugar al chistoso en dos locales de California, haciéndose pasar por el CEO de la compañía.
La broma consistió en que el youtuber Trollmunchies llegó a dos restaurantes diciendo ser el jefe máximo de la empresa y tratando mal a los empleados. En uno de ellos pidió comida para realizar una "prueba de sabor", mientras que en otro le quitó la comida a un cliente diciendo que estaba contaminada y que era "carne de perro".
Los videos con las jugarretas fueron publicados en su canal de YouTube, aunque rápidamente fueron ocultados y ya nadie los puede ver.
Pero eso no impidió que In-N-Out interpusiera una demanda en la que piden que se le prohiba a Cody Roedster entrar a sus restaurantes y además exigen el pago de USD $25.000 a modo reparatorio.
En un comunicado entregado a CBS Los Angeles, la empresa indicó que en el último tiempo han aumentado las "visitas" de gentuza que va a puro payasear y nada más. "Esta gente engaña para aprovecharse de las personas en los restaurantes y han intentado humillar y ofender a nuestros clientes y empleados. Es momento de actuar para terminar con este tipo de asaltos".
No soy muy fan de los términos millenial, pero por una vez creo que bien vale uno: cancelen a los youtubers.
☛ El artículo completo original de Raúl Estrada Franco lo puedes ver aquí
No hay comentarios.:
Publicar un comentario