Hoy en día casi nadie escribe cartas. Es más fácil enviar un email, o un whatsapp, o un mensaje directo en Instagram… las cartas que recibimos o son multas o avisos del ayuntamiento, pocas veces tenemos una carta de un amigo contando sus últimas aventuras, y si lo recibimos, seguramente lo habrá escrito por ordenador.
Con el objetivo de recuperar la tradición, o hacer ver que así es, hay una empresa que nos permite enviar cartas escritas a mano: les enviamos el texto y un robot hace el trabajo manual.
Se trata de handwrite.io, y funciona siguiendo los siguientes pasos:
– Enviamos el texto y el destinatario a su web. Elegimos el tipo de letra y el tipo de papel.
– Ellos reciben la información y se la dan al robot escritor.
– El robot, con un bolígrafo en la mano, escribirá el texto en papel usando un algoritmo especial para que cada letra sea diferente, para que no se note que hay proceso automático por detrás. Dicen que cada letra hecha por ellos es como un copo de nieve, no hay dos iguales.
– La carta se envía a su destinatario, quien se quedará impresionado al ver cómo «hemos invertido mucho tiempo» en escribirle una carta a mano.
Está pensado para que sea posible enviar cientos de cartas por mes. De hecho podemos subir los destinatarios en archivo CSS, en masa, por lo que es posible enviar mensajes publicitarios a cientos de personas en una carta «escrita a mano». El sistema se integra con plataformas de automatización, para dejarlo menos personal si cabe. El resultado es bastante realista, eso sí:
El precio para una carta es de menos de 5 dólares, y de algo más de 200 mensuales si queremos enviar 100 cartas por mes. De momento solo funciona dentro de Estados Unidos, pero no sería raro que la idea comience a cruzar fronteras.
Hoy en día no podemos fiarnos ni de las cartas «escritas a mano» que recibimos, siempre hay un robot detrás.
☛ El artículo completo original de Juan Diego Polo lo puedes ver aquí.
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