Si nos preguntan cuál es la temperatura “normal” de nuestro cuerpo, la respuesta instintiva será 37º Celsius. Cuando el termómetro supera esa marca, solemos hablar de fiebre, leve o alta en función de en qué medida nos alejemos de la cifra. Sin embargo, con el tiempo los expertos en salud se han ido dando cuenta de que la realidad es un poco más compleja.
La cuestión de la temperatura corporal no es una mera curiosidad. La fiebre es una importante respuesta de nuestro cuerpo ante muchas enfermedades o trastornos, generalmente ante infecciones.
La fiebre es un arma de doble filo: nuestro cuerpo eleva la temperatura para intentar matar los virus y bacterias que puedan estar dañándolo, a la vez que activa la respuesta inmune de nuestro cuerpo; sin embargo, en el proceso la fiebre puede también poner en riesgo el correcto funcionamiento de nuestros órganos y causarnos otros problemas como la deshidratación.
Puesto que la fiebre es una respuesta común ante diversas enfermedades, también nos puede servir como herramienta diagnóstica, para estrechar el círculo sobre los posibles padecimientos que nos afectan.
Responder a la pregunta de cuál es la temperatura “normal” de nuestro cuerpo es difícil. Y los motivos detrás de esto son varios.
En primer lugar, porque, a lo largo del último siglo y medio, la temperatura media estimada del cuerpo humano ha ido reduciéndose. La noción de que nuestra temperatura corporal está en 37º se remonta a mediados del siglo XIX.
En 1868, el médico alemán Carl Reinhold August Wunderlich realizó un estudio a partir de 25.000 pacientes y más de un millón de tomas de temperatura. A partir de estos datos, calculó que la temperatura promedio era de 37º, pero también observó ciertas desviaciones.
No sabemos muy bien por qué se ha ido reduciendo la temperatura corporal a lo largo del tiempo. Una posible explicación está en las mejoras en higiene e inmunidad, que implicarían una menor incidencia de infecciones en la población y con ello temperaturas promedio más bajas. Pero esta es tan solo una de las diversas hipótesis que buscan explicar el fenómeno.
Distintas variables
El propio Wunderlich observó en su estudio que los hombres y la gente de edades más avanzadas solían tener temperaturas corporales más bajas, mientras que mujeres y los más jóvenes tenían temperaturas más elevadas en promedio. Lo que nos lleva al segundo motivo por el que establecer una lctura “normal” resulta especialmente difícil. Y es que depende.
Sexo y edad son dos de los factores que pueden hacer que lo “normal” para una persona no lo sea para otra. Pero otros factores también pueden alterar esta cifra. Un estudio publicado en 2023 en la revista JAMA Internal Medicine midió el grado en que estos factores afectaban a la temperatura corporal, pero también añadió nuevas variables como altura, masa corporal y la hora del día a la que se tomaba la medida.
Entre la muestra de 618.306 observaciones, la temperatura promedio se situó en 36,64º Celsius. Entre los participantes, las lecturas promedio de cada individuo oscilaron entre los 36,24º y los 36,89º.
También cabe recordar que existen distintas formas de medir la temperatura corporal (timpánica, oral, axilar…) y que cada una presenta unas leves desviaciones asociadas.
Entonces, ¿con qué temperatura llega la fiebre? Como resulta evidente tras lo que hemos leído, la respuesta es que depende de cada persona y situación, aunque por fortuna, siendo las variaciones de menos de un grado, la interpretación de los resultados de un termómetro quizás no sea tan distinta a la convencional como para afectar a decisiones como la de quedarse o no en casa durante un catarro. Sin embargo, para los expertos en salud, tener un mejor conocimiento sobre estas variables puede ser de gran ayuda.
Es por eso que un nuevos estudios también han indagado en esta cuestión. Uno publicado en noviembre del año pasado en la revista Scientific Reports por investigadores surcoreanos, analizó la temperatura corporal de 9.195 pacientes hospitalarios a través de mediciones timpánicas de temperatura (la temperatura timpánica suele estar medio grado por encima de la medida de forma oral y alrededor de un grado por encima de la axilar). El equipo estimó una temperatura promedio de 36,91º Celsius, y una frontera de 37,81º para la fiebre.
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La noticia El mito de los 37º: cada vez tenemos más claro que no existe una temperatura "normal" del cuerpo fue publicada originalmente en Xataka por Pablo Martínez-Juarez .
☞ El artículo completo original de Pablo Martínez-Juarez lo puedes ver aquí
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