Jay Graber, CEO de Bluesky, celebró este logro en redes sociales afirmando: «Buen trabajo, Brasil, tomaste la decisión correcta». Este crecimiento es notable para una plataforma que se abrió completamente al público en febrero y que, con humor, se autodenomina “el rey corto de las aplicaciones sociales”. Hasta mayo de 2024, Bluesky contaba con más de 6 millones de usuarios.
Contexto detrás de la prohibición de X
Bluesky fue lanzado en 2019 como una iniciativa respaldada por Twitter para construir un protocolo social abierto y descentralizado. Desde entonces, se ha convertido en una corporación independiente de beneficio público. Jack Dorsey, fundador de Twitter, dejó la junta directiva a principios de este año.
Por otro lado, X, bajo la dirección de Elon Musk, se ha visto envuelto en una batalla legal con el juez de la Corte Suprema de Brasil, Alexandre de Moraes. El conflicto surgió debido a la negativa de X a bloquear ciertas cuentas en el marco de una campaña más amplia contra la desinformación electoral. X anunció a principios de mes que cerraría sus operaciones en Brasil, y tras no nombrar un representante legal en el país, Moraes procedió con la prohibición. Además, advirtió con multas a los usuarios que intenten evadir la prohibición usando una VPN.
La respuesta de los usuarios brasileños
Ante la inminente prohibición, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se despidió de sus seguidores en X redirigiéndolos a sus otras cuentas en redes sociales, comenzando por Bluesky. Este cambio de plataforma por parte de un líder político de alto perfil podría haber contribuido a la oleada de nuevos usuarios que se han unido a Bluesky en los últimos días.
La prohibición de X en Brasil ha abierto una ventana de oportunidad para Bluesky, que ha aprovechado para posicionarse como una de las principales plataformas sociales en el país. Este caso ilustra cómo las decisiones legales pueden influir rápidamente en el panorama de las redes sociales, impulsando a nuevos jugadores a la vanguardia.
☞ El artículo completo original de Juan Diego Polo lo puedes ver aquí
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